El Ministerio de Comercio de Turquía ha publicado recientemente un nuevo decreto con el objetivo de reforzar los requisitos de asistencia posventa para los vehículos eléctricos importados. Según esta disposición, todas las empresas que exportan vehículos eléctricos a Turquía deben establecer al menos 140 centros de servicio autorizados en el país, garantizando una distribución uniforme de estos centros en todo el territorio turco. Además, cada marca de vehículos eléctricos también debe establecer un centro de atención telefónica específico.
Esta medida se considera generalmente como una respuesta del gobierno turco al aumento de las importaciones de vehículos eléctricos chinos. El rápido crecimiento de los vehículos eléctricos chinos en el mercado turco ha suscitado la preocupación del gobierno turco. Según los informes, en los primeros 10 meses de 2023, el valor de los vehículos eléctricos exportados por China a Turquía ascendió a 184 millones de dólares estadounidenses, el doble del volumen de exportación de todo el a?o 2022.
Esta medida se suma a otras adoptadas contra los vehículos eléctricos chinos, tras la apertura de una investigación antidumping por parte de la Unión Europea. Cabe destacar que los productos importados de países de la UE con los que Turquía tiene un acuerdo de libre comercio no están sujetos a este decreto.
Se exige a los fabricantes de automóviles pertinentes que cumplan con esta nueva normativa antes de finales de mes, aunque para muchas empresas se trata de una tarea prácticamente imposible de realizar. Actualmente, varias empresas están solicitando al gobierno que modifique o prorrogue la aplicación de esta normativa.
El director general de BYD Turquía, Ismail Erguna, ha indicado que BYD tiene previsto establecer una red de servicios autorizados en todo el país y ya ha firmado contratos con distribuidores. Ha advertido que, si la normativa se aplica según lo previsto, los productos importados podrían tener que esperar meses en la frontera.
El portavoz del Ministerio de Comercio de China, He Yadong, declaró el 7 de diciembre que la investigación antidumping de la UE no se ajusta a los intereses de las industrias automovilísticas de China y la UE, perturba y distorsiona gravemente la cadena de suministro de la industria automovilística mundial, incluida la UE, y podría tener un impacto negativo en las relaciones comerciales entre China y la UE.