La tensión y los continuos conflictos en la región del Mar Rojo, especialmente el aumento de las actividades de los hutíes, han tenido un profundo impacto en la actividad económica del Canal de Suez en Egipto. Los ataques aéreos lanzados por Estados Unidos y el Reino Unido contra objetivos hutíes en febrero de 2024 exacerbaron aún más la inestabilidad regional, provocando la interrupción generalizada de las rutas marítimas internacionales en el Mar Rojo y una caída en picado de los ingresos del Canal de Suez. Esto supone sin duda un duro golpe para la economía egipcia, especialmente teniendo en cuenta la deuda externa de 189\xa0700 millones de dólares y los 42\xa0260 millones de dólares que deben reembolsarse.

El Canal de Suez siempre ha sido una vía fluvial clave que conecta Europa y Asia por la ruta marítima más corta, generando miles de millones de dólares en ingresos anuales para Egipto, siendo una de las principales fuentes de divisas del país. Sin embargo, debido a la reciente crisis del Mar Rojo, los ingresos del canal se han reducido considerablemente; según el presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sisi, los ingresos del Canal de Suez se han reducido entre un 40% y un 50%.

El empeoramiento de la situación en el Mar Rojo no solo ha afectado a los ingresos del Canal de Suez, sino que también ha tenido un amplio impacto en los ingresos en divisas de Egipto. La fuerte caída de las remesas, el impacto del conflicto en el turismo y la creciente presión de la deuda externa constituyen conjuntamente importantes desafíos para la economía egipcia. Además, la continua depreciación de la libra egipcia está exacerbando el aumento de los precios internos, lo que está aumentando el coste de la vida para la población.

Ante estas presiones económicas, el gobierno egipcio se enfrenta al enorme desafío de mantener la estabilidad y el desarrollo económico. La preocupación por las perspectivas económicas de Egipto está aumentando en la comunidad internacional, y el Fondo Monetario Internacional (FMI) y las agencias internacionales de calificación crediticia como Moodys han revisado a la baja las previsiones de crecimiento económico de Egipto y han ajustado la perspectiva de la calificación crediticia del país.

Además, el comercio entre Egipto y China también se ha visto afectado por la crisis del Mar Rojo. En 2023, el volumen total del comercio bilateral entre China y Egipto disminuyó, lo que pone de manifiesto aún más el impacto potencial de la tensión en la región del Mar Rojo en el comercio mundial.

Ante estos desafíos, el gobierno egipcio y la comunidad internacional deben tomar medidas urgentes para aliviar la presión económica, al tiempo que buscan soluciones políticas y diplomáticas para reducir la tensión regional, con el fin de garantizar la fluidez del Canal de Suez y la estabilidad regional. Las empresas de comercio exterior que mantienen relaciones comerciales con Egipto también deben seguir de cerca la evolución de la situación regional y ajustar sus estrategias comerciales en el momento oportuno para reducir los posibles riesgos comerciales.